Cómo lavar verduras
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- Categoría: Trucos de cocina
Las verduras, hortalizas y frutas son una gran fuente de elementos y propiedades beneficiosas para nuestro organismo. Los expertos recomiendan consumir 5 piezas de fruta o verduras aunque comer 7 o más porciones es aún más beneficioso. Sin embargo, las verduras y demás vegetales hay que lavarlos correctamente para que la contaminación no contrarreste estos beneficios.
Las verduras, frutas y hortalizas están expuestas a numerosos contaminantes, ya no sólo del entorno sino también patógenos nocivos provenientes de los procesos a los que son sometidas durante el cultivo y la recogida. Si además añadimos el hecho de que se consumen generalmente crudas el riesgo aumenta. Por ello podemos seguir una serie de trucos a la hora de lavarlos para asegurarnos de que queden totalmente desinfectadas.
Pasos para lavar los vegetales correctamente
Lavarse las manos:
No tendría sentido centrarnos en lavar bien los alimentos si tenemos las manos sucias. Así que será mejor lavarse concienzudamente las manos antes de ponernos manos a la obra. Recuerda que nosotros estamos tocando continuamente objetos sucios y aunque no nos pase nada no es lo indicado trasladar estos elementos a los alimentos que comemos.
Quitar las hojas
Muchas veces los vegetales incluyen algunas hojas del brote. Estas partes están tan expuestas a los patógenos como el resto del alimento, por lo que lo más correcto es retirarlas para que dichos contaminantes no manchen de más el agua de limpieza.
Lavar los vegetales antes de pelarlos:
Lo más indicado el lavar los vegetales antes de pelarlos, así evitaremos que los patógenos del exterior sobrepasen la corteza y contaminen la pulpa del alimento. Incluso si el producto se va a consumir pelado, ya que al pelarlo los contaminantes pueden entrar en la verdura o fruta.
Sumergir los alimentos.
Hacer una inmersión del vegetal en agua es una forma eficaz de hacer que restos de tierra y otros elementos se desprendan del alimento. En vez de pasar los productos por debajo del grifo podemos llenar un barreño de agua y sumergir los alimentos durante 2 minutos para asegurarnos de que todos los elementos se separan de éste.
Limpiar los cubiertos
Al igual que no tendría sentido lavar los alimentos para comerlos con las manos sucias, debemos limpiar debidamente los utensilios que vayamos a utilizar. Friégalos bien con jabón desinfectante antes de utilizarlos, ya que pueden ensuciarse si llevan mucho tiempo en el cajón de los cubiertos.